LA OTRA MEJILLA, NO EL CULO.

Extraído integramente de COPE.es

El Vaticano invita a los musulmanes a unir fuerzas contra la violencia.
El Vaticano ha invitado a los musulmanes a luchar juntos contra la violencia interreligiosa en el mensaje que cada año envía a los representantes del Islam con ocasión del final del Ramadán.

El título de la misiva, que lleva la firma del presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso, el cardenal francés Jean-Louis Tauran, es 'Cristianos y Musulmanes: juntos para vencer la violencia entre fieles de religiones distintas'.

En el texto, Tauran recuerda que entre las causas de este tipo de violencia está "la manipulación de la religión con fines políticos o de otro tipo", así como "la discriminación en base a la etnia o a la identidad religiosa, las divisiones y las tensiones sociales".

Asimismo, "la ignorancia, la pobreza, el subdesarrollo" o "la injusticia" son "igualmente fuentes directas o indirectas de la violencia no sólo entre comunidades religiosas, sino también dentro de ellas mismas", destaca.

Para acabar con esta situación, el cardenal considera necesario que "las autoridades civiles y religiosas ofrezcan su propia contribución para poner remedio a semejantes situaciones, con vistas al bien común de toda la sociedad".

Muy bien, señores de Vaticano. Entiendo que ustedes, como Estado han de velar por mantener buenas relaciones con todo el mundo. Comprendo que como Iglesia de Cristo han de dar mensaje de Paz. Comprendo también que mantenga cordialidad con las demás iglesias cristianas, y con los representantes de otras confesiones incluso con los del Islam.

Por del texto entresacado que hemos leído más arriba, un extraterrestre que viniera hoy mismo del espacio bien podría entender que hay violencia entre los fieles de las dos confesiones, cuando en realidad lo que tenemos es un goteo permanente de cristianos asesinados a manos musulmanas, una violencia creciente y UNIDIRECCIONAL contra el cristianismo, no solo en los estados teocráticos islámicos sino en pleno occidente donde cada día siempre hay una victima de los moros por la simple razón de lucir un cricifijo o una medallita.

Así es que, señores de Vaticano, vale ya de tanto buenismo para con nuestros enemigos o habrá que investigar lo que cultivan ustedes en los jardines pontificios.